ENTREVISTA A FÉLIZ PÉREZ, ESPECIALISTA DEL GREIM
«He visto en el monte a gente con zapatillas de boxeo y con tacones de aguja»
Tenemos unas diferentes dependencias y orgánicamente estamos encuadrados en una comandancia; en cada provincia de España hay una comandancia. Orgánicamente nosotros dependemos de la compañía de San Lorenzo de El Escorial, funcionalmente dependemos del Jefe de esa comandancia y luego a nivel operativo si nos llaman porque hay un problema en la comandancia de Guadalajara, operativamente dependeremos de ese mando. A nivel operativo, si afecta a una unidad solamente, por ejemplo un operativo que se active en la Sierra de Guadarrama y que afecte solamente a la sección de Navacerrada, lo dirijo yo, si estoy al cargo, o lo dirige el más antiguo o el más capacitado, dependiendo de las circunstancias. Si es un operativo que se da en Gredos y se nos pide apoyo, entonces yo, como mando técnico, me haría cargo de coordinar ese operativo que pudiera aglutinar a diversas unidades.
Si es a nivel mayor, la dependencia técnica es directa de Jaca. Todas las unidades dependen del Jefe de Área, que es el intermedio, y luego directamente del Coronel Jefe del Servicio de Montaña que está en Jaca. Curiosamente se trata de la única jefatura de los servicios especializados de la Guardia Civil que está fuera de Madrid, ya que el germen de rescate de la Guardia Civil fue en el Pirineo y se ha conservado ese nexo.
En una región tan pequeña como Madrid funciona el GREIM y el GERA (dependiente de los Bomberos). ¿Cómo se coordinan para no pisarse competencias?
Se trata de aportar soluciones. La prioridad es dar un servicio adecuado al ciudadano. Nos coordinamos conforme a un convenio que en su momento firmó el Ministro del Interior y el entonces Consejero de Medio Ambiente, donde hay una serie de cláusulas, pero en principio es sentido común. Todas las activaciones normalmente entran por el 112 y la Comunidad de Madrid lo primero que hace es diferirlo al GERA, donde se decide si se hacen cargo o no.
Si es al margen de la Comunidad nos hacemos cargo nosotros. Si el GERA necesita apoyos los demanda a través de nuestra central. Si es un accidente con resultado de muerte, ya es responsabilidad exclusivamente de la Guardia Civil, tema de la policía judicial. En temas de nocturnidad, mal tiempo o donde no se tenga la certeza de si la localización es Madrid o Castilla y León, ante la duda, se activan las unidades y se tratan de coordinar.
Nos surgen diferencias, pero nada descontrolado, y la prioridad es aportar soluciones.
¿Piensas que nuestra sierra es especialmente peligrosa? Y si lo es ¿por qué?
La sierra no, los usuarios sí. Diría, aunque puede herir susceptibilidades, que el madrileño es un animal peligroso, con todos los respetos. Es un monstruo que tiene seis millones de habitantes viviendo en una cultura del ocio donde lo que quiere es tener cinco minutos libres para expandirse y la expansión natural de este monstruo es el entorno de la sierra. Es una sierra muy accesible y muy maltratada porque tiene un volumen de gente muy impresionante. Está muy masificada. Y luego otra cuestión es falta de criterios montañeros. La gente tiene hábitos de hacer actividades en la montaña pero no tiene el concepto de respeto a la montaña, para ellos es el escenario solamente de echar el tiempo, comer la tortilla, pasear a los niños, pasear al perro… Es un seudoparque donde realizar todos los hábitos propios de un parque urbano pero extrapolados a un entorno natural.
Además hay algo que cada vez tenemos menos, y es sentido común. Si tuviésemos un poco de sentido común, muchos de los accidentes o de las activaciones se solventarían sobre la marcha. Es una de las recomendaciones que siempre doy: cuando hagas la mochila lo último que debes de guardar en la seta -y digo la seta porque es lo más accesible– es sentido común. Si tienes un problema, mantén la calma y tira de sentido común. Y si te queda poco, tira del que tienes en la mochila y seguramente la decisión que tomes será la adecuada a ese problema que te haya surgido.
¿Cuáles son los puntos negros de nuestra sierra?
Por masificación, que es el problema, el puerto de Navacerrada, puerto de Morcuera, puerto de Navafría… Depende de si es invierno o verano, hay matizaciones. Curiosamente donde la gente deja el coche es uno de los puntos negros de la sierra. La gente se concentra en la Pedriza, que es uno de los sitios que más volumen de visitantes acoge. Pero no llenan el entorno. Hay gente que puede tirarse toda la vida yendo a la Pedriza y no la conoce, y la Pedriza tiene todavía rincones muy poco frecuentados. Es una gran desconocida. La gente se ciñe a los mismos entornos y a los mismos sitios.
¿Crees que la advertencia de que se podría cobrar un rescate en determinados casos puede ser una medida disuasoria?
Nadie que sufra un accidente quiere ser agente activo de ese accidente, lo que quieres es que le den solución a esa situación que se te ha generado en un entorno exigente, como es el entorno de la montaña. Hay que respetar que hay ciertas autoridades políticas de determinadas comunidades que han empezado a repercutir, la Guardia Civil esté o no esté desplegada, o tenga o no tenga responsabilidades en esas otras comunidades, hace la intervención y no repercute. En definitiva, nosotros somos unos servicios de la sociedad y no existiríamos si la sociedad no quisiese.
En la Comunidad de Madrid no se está repercutiendo, con algunos matices, sí que hay algún caso de algún rescatado por el GERA que sí que se le ha repercutido a través del seguro federativo. Pero, la Guardia Civil no repercute.
¿Cuál es el incidente más chocante en el que has intervenido?
Desde ver en entornos de monte a un paisano con unas zapatillas de boxeo o a una señora con zapatos de aguja. La gente llega al puerto y te pregunta “¿qué se puede hacer aquí” y tú te dices “¿qué me estás diciendo?”. Ésos son los peajes de la masificación. La gente parece que no va la sierra si no va al puerto de Navacerrada, al de Morcuera o al de Navafría.
Explica brevemente cómo es vuestro proceso de selección y de formación.
Tiene un componente físico, un componente técnico y un componente de historial a nivel de montaña. También hay test psicológicos. Lo duro o no duro de las pruebas depende del grupo de personas que quieran optar a esas plazas, que normalmente no son muchas, alrededor de 15 plazas. Por razones de ratio son cursos muy exigentes.
Básicamente es un curso lectivo desde septiembre hasta julio. Es un curso muy interesante que incluye todo, espeleosocorro, rescate en exclusiva… Al salir del curso, utilizando el símil, es lo mismo que el carné de conducir, tienes la formación y estás en disposición de hacer tu trabajo, pero será la experiencia del día a día, la integración en una unidad y el asumir ese rol de trabajar para los demás lo que en definitiva te formará para ello.
Si alguien quiere más información sobre el acceso a estos grupos de rescate, ¿dónde puede informarse?
Hay una página no oficial donde hay información sobre los rescates más significativos, vídeos, charlas, conferencias, formas de acceder al curso, etc. Y siempre tienes la opción de pasarte por el cuartel de la Guardia Civil de tu lugar de residencia y demandar la información.
¿Actualmente cuánta gente se integra dentro de los grupos?
A nivel nacional somos una familia, unos 250. Comparativamente la sección de Navacerrada es una sección pequeña, estamos 13.
¿Cuál es el ámbito de actuación del GREIM? ¿Intervenís en Gredos y en Ayllón?
Nosotros estamos encuadrados en la comandancia de Madrid que básicamente es la provincia de Madrid, pero cualquier problema o activación que surja en Toledo, Cuenca, Guadalajara o Albacete nos va llegar a nosotros. En Gredos concretamente están asentadas dos unidades de montaña como pueden ser Barco de Ávila y Arenas de San Pedro, y normalmente ellos son los que tienen la responsabilidad. Si ellos, por la circunstancia que sea, necesitan apoyo, nosotros por proximidad somos los primeros que estamos en disposición de prestar ese apoyo. Pero normalmente son autónomas, salvo que se considere que es necesario contar con apoyos. Ayllón concretamente es responsabilidad de la sección de Navacerrada. Guadalajara es nuestra.
El hecho de que intervenga el GERA (que depende de los Bomberos), ¿conlleva una relajación de vuestro entrenamiento en materia de rescates de montaña?
No, y ése era y es un riesgo. Puedes perder la meta final de tu preparación que es orientar todo al rescate, a la intervención. Lo que no debe ocurrir es que ocurra una activación en un operativo y te desborde. Tienes que tratar de mantener la motivación y el estímulo permanente, debes mantener las aptitudes y la formación. Tienes que mantener la operatividad alta.
El GERA denunció en su día que demasiadas veces requerían su servicio sin que fuera realmente necesario. ¿Habéis observado también vosotros este comportamiento?
No. Hemos perdido como montañeros el sentido de la supervivencia, de generar automatismos. Es muy fácil llegar a la montaña y estar donde tú no tenías pensado llegar, pero puedes desandar el camino y revertir la situación, porque si estás al lado del camino, a algún sitio llegarás. Muchas intervenciones a nivel de perdidos por teléfono se solventan. Pero yo quiero pensar que nadie que avisa tiene el afán de notoriedad o de pasear en helicóptero. Puede haber algunos casos con precedentes en base a rescates mediáticos y de imitación para tener el protagonismo, pero son casos puntuales. De todas formas, si el GERA lo ha manifestado es porque tendrá alguna experiencia en ese sentido.
Los Guardias Civiles que estáis en el GREIM o en otro grupo de rescate, ¿llegáis allí voluntarios o los mandos pueden destinar a cualquiera?
Normalmente son destinos voluntarios, tienes la formación y normalmente optas a las unidades que te puedan interesar. Puede ocurrir que tú no tengas opción de ocupar las que te interesen y puedas terminar en otras unidades diferentes o incluso destinos forzosos, pero yo creo que a día de hoy ninguno de nosotros tenemos ningún destino forzoso en unidades de montaña.
Entrevista de Federación Madrileña de Montañismo